Los protocolos son útiles para orientar las respuestas del personal de la escuela a las situaciones que muchos encuentran incómodos o incapaz de manejar. Además, proporcionan un medio para asegurar que las responsabilidades y las obligaciones legales de la escuela se tratan, incluso en situaciones en las que el personal puede no tener esto como su principal preocupación. En su discusión de protocolos de la autolesión, Walsh (2006) explica que «la ventaja de contar con un protocolo escrito es que el personal sepa cómo responder a la autoagresión sistemática y estratégicamente.» Es fundamental tener en cuenta que, si bien una protocolo de autolesión puede ser similar al que se utiliza para manejar el comportamiento relacionada con el suicidio, no es el mismo. Los dos tipos de protocolos pueden, sin embargo, compartir elementos comunes y los protocolos relacionados con el suicidio son a menudo un buen punto de partida para el desarrollo de protocolos de autolesiones no suicidas.
Bubrick, K., Goodman, J. & Whitlock, J. (2010). Non-suicidal self-injury in schools: Developing and implementing school protocol. [Fact sheet] Cornell Research Program on Self-Injurious Behavior in Adolescents and Young Adults. Retrieved from https://www.selfinjury.bctr.cornell.edu/documents/schools.pdf
Bubrick, K., Goodman, J. & Whitlock, J. (2010). AutoLesión No Suicida en colegios: Desarrollando e implementando un protocolo para colegios. Non-suicidal self-injury in schools: Developing and implementing school [Hoja informativa] Programa de investigación Cornell sobre comportamiento autolesivo en adolescentes y jóvenes adultos. search Program on Self-Injurious Behavior in Adolescents and Young Adults. Recuperado de http://www.selfinjury.bctr.cornell.edu/documents/schools.pdf
Esta es una actividad más del proyecto “Traducciones de autolesion”