Desde el Servicio de Salud Mental y Adicciones del Hospital Municipal explicaron cuáles son los principales factores que conducen a una persona a autolesionarse y de qué manera tratan la problemática desde el espacio integrado por profesionales de la salud.
A raíz de la cantidad de cantidad de casos de cutting de los que tomó conocimiento el personal del Servicio de Salud Mental y Adicciones del Hospital Dr. Ignacio Pirovano de General Arenales, el equipo de profesionales decidió profundizar el trabajo en el tema, a través de campañas de difusión que tienen como objetivo central dar a conocer la posibilidad de un tratamiento, de prevenir y tratar la problemática con tiempo para evitar usar el cuerpo como mapa del dolor.
En diálogo con Democracia, la coordinadora del servicio, licenciada María Laura Malagamba, dio detalles acerca del trabajo en el espacio.
– ¿Cuál es el denominador común entre las personas que se autolesionan, una práctica también conocida como cutting?
– El denominador común en este tipo de casos es la angustia, la frustración, la sensación de desesperanza, la ansiedad y a esto se le suma la imposibilidad de poner en palabras el dolor. Las personas que se auto flagelan expresan el dolor a través del cuerpo, porque no tienen la capacidad de hacerlo de otra manera. De un dolor abstracto, como puede ser la tristeza, pasan a un dolor real, físico, lo manifiestan a través de lo concreto.
– ¿Cómo detectan los casos de cutting y de qué manera llevan a cabo la campaña de difusión?
– La problemática la comenzamos a trabajar a raíz de la cantidad de casos que recibíamos en el Servicio de Salud Mental, por la demanda de atención, por la decisión de los colegios de abordar el tema. A veces el caso puede entrar por la guardia, tenemos una psicóloga allí las 24 horas, todos los días del año, otros los detectan los equipos de los colegios y otras veces en los consultorios externos, si la persona solicita tratamiento. Armamos el boletín informativo con este tema, también folletería, y de ese modo buscamos que se hable de cutting.
– ¿En qué grupo etario se advierte la mayor cantidad de casos de cutting en Arenales?
– Con este tipo de padecimientos nosotros recibimos a jóvenes de entre 12 y 25 años, aproximadamente; si bien hay casos de personas más grandes,son en menor proporción. Mayormente vemos autoagresiones con cortes superficiales y hemos tenido casos en los que los cortes son profundos y necesitan intervención clínica. También recibimos casos con quemaduras, casos en los que se arrancan mechones de pelo, entre otros tipos de maltratos en el cuerpo. Lo que notamos es el incremento de cutting en adolescentes, en adultos se ven otras autolesiones.
– ¿En qué sentido es importante la difusión de esta problemática?
– La importancia que le damos a la difusión es para la prevención, para la detección temprana. Nosotros buscamos que estas personas reciban asistencia y puedan poner en palabras lo que les pasa, que no lleguen a lastimarse el cuerpo, que no utilicen el cuerpo como mapa del dolor. En ese sentido, es muy importante que sepan que hay un lugar al que pueden asistir.
– ¿Cuáles son las principales preocupaciones del adolescente hoy y por qué se generan estas angustias que los conducen a lastimarse?
– Por un lado hay una cuestión evolutiva en la que se generan duelos y, en este sentido, la adolescencia es una etapa de dolor. Pero, al margen de esto, vemos abandono, falta de contención, de escucha, los adolescentes hoy tienen el autoestima muy baja, lo socio-ambiental les afecta mucho, les faltan referentes que puedan guiarlos y contenerlos, se sienten solos. Muchos se autolesionan por una cuestión impulsiva, esto tiene que ver con los impulsos, con no poder parar y hacerse daño. Otros lo hacen por contagio, ha pasado en los colegios que repiten la conducta.
– ¿Qué cantidad de consultas reciben en el Servicio y cuál es la problemática más frecuente?
– En este momento se está brindando tratamiento ambulatorio a entre 200 y 300 pacientes por semana de todo el distrito de General Arenales. Tenemos casos de ataques de pánico, intentos de suicidio (cada vez se presentan más casos), situaciones traumáticas por accidentes de tránsito, adicciones. En noviembre se cumple un año de que inauguramos el Servicio de Salud Mental y para esa fecha vamos a presentar estadísticas con la cantidad de casos.
– ¿Cuál es la respuesta de los familiares en lo que respecta al tratamiento en este tipo de casos?
– Tenemos un abordaje totalmente amplio: se contempla a la familia y al paciente. En el caso de que necesiten tomar medicación tenemos una psiquiatra, si no lo pueden tomar por sí mismos se les asigna una enfermera, se hace un seguimiento especial con asistentes sociales, en otros casos se les asigna acompañantes terapéuticos y demás. Es un abordaje interdisciplinario y las familias responden en base a la predisposición que tengan. Es una realidad que, hoy por hoy, muchos adolescentes llegan muy abandonados, con poca contención familiar.
FUENTE: Diariodemocracia.com el 20/08/17